El bloguero de la megablógolis

se quiere desblogueromegablogolizar,
el que lo desblogueromegablogolizare
será un desblogueromegablogolizador


lunes, 1 de noviembre de 2010

Vayamos por los detalles

Esta semana Jalisco se dio el lujo de perder 952 millones de pesos que tenía autorizados del Fondo Nacional de Infraestructura para la construcción de un sistema de transporte. El fondo del problema fue la polarización que se dio a partir de que el autobús azul fue presumido por la administración estatal frente a las elecciones de 2009 como un logro de gobierno. Los detractores, del PRI, optaron por atacar el sistema considerándolo indigno y clamando por un tren ligero.

El tren ligero sí es mejor que el autobús de tránsito rápido (BRT). Sin embargo, también es bastante más caro. El tren es un poco más cómodo, puede ser más silencioso, eventualmente podría tener más capacidad aunque los últimos sistemas de autobús están eficientando el manejo de los viajeros de tal manera que ya hay sistemas BRT cuya demanda supera la de muchas líneas de metro. La diferencia en costo de inversión puede ser de 10 a 1 en ocasiones. También hay otras ventajas del BRT: no se generan barreras urbanas y los antiguos operadores del transporte público no se quedan desempleados sino que son incorporados en la operación del nuevo sistema.

En el caso del Macrobús línea 2, el proyecto que orgullosamente tiraron los traidores a Jalisco, Héctor Vielma y Aristóteles Sandoval, más por intereses partidistas que por compromiso con sus electores, veamos la diferencia: una línea de aproximadamente 32.5 kilómetros entre Zapopan y Tlaquepaque costaría menos de 3 mil millones de pesos. Ahora entre Zapopan y Guadalajara, en una ruta similar pero más corta, proponen una línea del tren ligero de 11.5 kilómetros y 7 mil millones de pesos. ¿Qué prefieres: tres autos de 110 mil pesos y 400 mil pesos en los bolsillos o un Mercedes Benz de 700 mil pesos?

No a todo mundo le gusta el Metrobús, a muchos no les gusta el Macrobús, que sin embargo es más criticado por quienes no lo usan que por quienes lo usan. Las estaciones podrían ser mejores, la calidad podría también mejorar, hubo celo porque se afectara "la Calzada" cuando antes ésta iba copada de autobuses urbanos en todos sus carriles. Hay errores evidentes en la gestión del gobierno de Jalisco respecto al Macrobús. Sin embargo, la posibilidad de que Guadalajara cuente con una red de transporte que llegue a todos los rincones es de momento inexistente gracias a las gestiones de Vielma y Sandoval. Suponiendo que se construya el tren ligero, no se abrirá antes de 4 años. En ese mismo lapso y con el mismo costo podrían construirse la línea 2 y otros 40 kilómetros de Macrobús.

Las críticas a estos sistemas de transporte provienen generalmente de quienes no los usan, y en particular de los automovilistas que se ven presuntamente afectados por una asignación más eficiente del espacio vial. Digo presuntamente pues a menudo los sistemas BRT ponen orden en las vialidades y no necesariamente éstas reducen su capacidad. En el caso de Insurgentes hay opiniones encontradas. Una labor responsable de los políticos que presiden Zapopan y Guadalajara era demandar con firmeza mejoras en el Macrobús línea 1 y apoyar la instrumentación de la línea 2 ... pero como buenos políticos vieron mayor rentabilidad (de corto plazo, por supuesto) en oponerse ciegamente en vez de construir.

Los que defendemos la ampliación de los sistemas BRT vemos ciudades bien servidas por sistemas de transporte de calidad que, una vez cubiertas, puedan escalar sus líneas de autobús en carril confinado a trenes ligero, metro, trenes exprés o suburbanos. No compremos el Mercedes Benz si no sabemos manejar, mejor vayamos a paso a paso.

Lo que ocurrió en Guadalajara no debe ocurrir en la Ciudad de México. Insurgentes en general es reconocido como un éxito y muchos automovilistas lo usan. Eje 4 Sur, con tantos accidentes y habiendo reducido la capacidad para los autos en un importante eje vial tuvo menos éxito. Eje 1 Poniente tiene un problema similar. En realidad lo que debe ocurrir de ahora en adelante es que la autoridad se esmere por cuidar hasta el más mínimo detalle: reducir la tala de árboles en los proyectos, hacer estaciones con arquitectura agradable, hacer a los vecinos partícipes del proyecto, transformar positivamente la zona, generar plusvalía, reponer banquetas y espacios verdes, señalizar, iluminar, dar mantenimiento.

Hay que ir un paso adelante en los sistemas de autobús, antes de que llegue otro traidor como Aristóteles Sandoval a darle a un estado una puñalada por la espalda.

No hay comentarios: